
La audición eterna
Hay cientos de cosas para las que uno puede audicionar, generalmente se relacionadas a alguna habilidad artística.
He estado en 2 audiciones, audiciones de danza y es una sensación rara hay muchísimas emociones juntas: esperanza, vergüenza, pánico, ilusión… ay yo no sé que más… solo son muchas.
Puede que uno hasta se enferme de los nervios… si logra llegar al final de la audición, al momento cuando le dicen y la ganó o la perdió… puede ser que sea lo peor! inclusive puede que usted no pueda hablar bien.
Y la cosa es que las audiciones son generalmente la conclusión de un proceso bastante díficil, hay montones de sacrificios para que uno pueda llegar ahí, para “tener” lo que no quiere, montones de prácticas, montones de tiempo dedicados al sueño y usted llega ahí… a “un paso” de alcanzarlo… pero también de no alcanzarlo… uno está nervioso… tal vez ve a la gente alrededor, y ellos están esperando lo mismo que usted, ellos también se sacrificaron, es su sueño también, pero todos saben que sólo hay unos cuantos espacios disponibles, tal vez solo uno vaya a entrar, los demás… pues corazones rotos…
Hace unos días me encontré con una amiga, ella iba a una audición de canto (y tiene una voz muy bella), y me dijo que no podía hablarme por su audición y cuando hablaba era con una voz muy bajita… y fue un poco raro porque ella se veía tan preocupada, cuando generalmente es muy alegre… y empecé a pensar en todos sus ensayos (años de eso), todos los sacrificios, todos los ejercicios, todas las pequeñas cosas que hizo o dejó de hacer solo por cantar, siempre cuidando su garganta, etc, etc, etc. y llegué al punto en que dije “Dios! tenemos que estar locos para hacer ese tipo de cosas!!!!, cómo sobrevivimos a toda la presión, la humillación, las (muy frecuentes) comparasiones injustas???

Entonces me acordé de ciertas conversaciones que habíamos tenido sobre audicionar y sobre como la gente hace las cosas más desesperadas para obtener atención (como hombres audicionando para partes de mujeres) y tal vez es su única oportunidad entre miles de personas (35000 personas audicionaron para ser el idolo australiano del año!!! ) finalmente llegó a mí cabeza la conclusión de “de qué carajos estoy pensando”… después de todo audicionamos todos los días, para todo!!! La vida es una audición eterna.
Todos los días cargamos presiones, pasamos nerviosos, pensando en el futuro, practicando, preparándonos para la vida que queremos.
Cada entrevista de trabajo es tan enervante como una audicón, usted quere gustar, quiere ser el indicado, quiere que lo escojan, quiere verse profesional, quiere saber para que le den el trabajo.
Y que tal las salidas? Especialmente las primeras citas! por Dios! hay que admitir que es así! debería decir esto? me pongo aquello? pregunto esto al principio o al final de la noche? se va a asustar? … o exámenes! Dios! cuántos exámenes hay que hacer en esta vida!!!!!!!
Y el juego continúa.. queremos gustarle al jefe, a nuestro padres, a nuestra pareja, al profe, a quien está sentado a la par de nosotros… a veces queremos gustarle al universo entero!
Y bueno así es la vida, así es como funciona, y no hay como salirse de ahí! nada más hay que estar conciente de la audición eterna, tal vez así podemos escoger cuando presentarnos y a quién y cómo usar el esfuerzo solo para las cosas que de verdad valen la pena y que de verdad queremos.

Dibujos de: http://www.sheckymagazine.com y de www.CartoonStock.com